De troncos a cracks, los dos jugadores están agradecidos con la llegada de Paunovic a Chivas

Uno de los principales temas que se tocó desde la llegada de Paunovic era la exigencia que se tendría con cada jugador que quisiera mantenerse en Chivas. Desde cada entrenamiento todos estarían siendo analizados duramente para poner a los jugadores que en mejor nivel se encontrarán con la mente en obtener buenos resultados.

La manera de trabajar de Paunovic ha dado dividendos más que positivos acumulando victorias en cuanto partido se le atraviesa y lo más importante, elevando el nivel de competencia prácticamente de todo el plantel que sabe que no puede relajarse ni un segundo si es que no quiere perder su puesto como titular o cambio recurrente.

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Gracias a las rotaciones que ha hecho Paunovic a lo largo de la pretemporada, casi todos los jugadores que forman parte del primer equipo han visto minutos. Los que venían jugando con Cadena, los que entraban de cambio y los juveniles de la cantera, todos, han tenido su oportunidad de demostrar sus cualidades para ganarse un puesto.

Al saber que la competencia es fuerte cada jugador deja lo mejor de sí cada vez que puede jugar y esto solo ha causado que todo el plantel viva un buen momento, hasta algunos jugadores que parecían tener un pie fuera del Rebaño por su pésimo rendimiento sobre todo el torneo anterior.

Antonio Briseño y Alan Mozo han sido blanco de críticas casi durante toda su estadía en Chivas y pasaron de ser refuerzos de lujo a estar en la banca mucho tiempo. En el duelo de ayer ante los Amargos, ambos defensas se comportaron a la altura dejando su portería en cero y haciendo coberturas adecuadas que muestran un diferente nivel de ambos defensores que fueron reconocidos por la afición que parece les dará una segunda oportunidad para brillar, al igual que Paunovic que los tiene en cuenta para el Clausura 2023.